CONTEXTO:
Leon Economista es un twittero totalmente a favor del capitalismo y del libre mercado. Critica fuertemente al gobierno, y en especial los asistencialistas con tintes socialistas.
Suele criticar los programas sociales gubernamentales y los derechos de los trabajadores como el aguinaldo, la antigüedad, el reparto de utilidades y el pago del seguro. Asegura que obligar al empresario a pagar esas prestaciones nos vuelve menos competitivos.
Frecuentemente argumenta que muchos problemas se resolverían privatizando los servicios básicos o al menos cobrándolos para evitar los impuestos del gobierno.
Y también ha expresado su negativa de ayudar a quien pide dinero sin ofrecer nada a cambio.
Hace dos días publicó este twit en su cuenta. --------->
Y luego pidió ayuda a la comunidad, compartiendo una lista de amazon que incluía un iPad Pro y una macBook, por un valor en conjunto de $40,000.
Las criticas y las burlas no se hicieron esperar.
Lo que le pasó a León Economista es una lección de vida. León es chavo; entiende muchas cosas, pero le falta vivir mucho. Tal vez nunca había pasado por esto que le sucedió y por eso le parecía muy sencillo criticar a quienes llegan a su casa a pedir dinero.
León no está equivocado en sus juicios, simplemente tiene visiones limitadas. Es cierto que mucha gente prefiere estirar la mano y pedir dinero antes que ponerse a trabajar, pero también hay muchos casos en los que quienes piden limosna son víctimas de la situación en la que están. Suponer que todos partimos del mismo nivel o que tenemos la misma suerte es errado y acorta nuestra visión.
Él dice que la ayuda y la solidaridad no deben ser obligación sino voluntarias, sin embargo cuando criticó a quienes iban a su casa a pedir dinero lo hacía como si lo estuvieran obligando a ayudarlos. ¿Por qué se quejaba de ellos entonces? ¿Porque le molesta que pidan sin ofrecer un servicio a cambio?
¡Eso fue justamente lo que él hizo cuando se vio en la necesidad! De hecho así lo dijo él, solo porque estaba realmente necesitado fue que se atrevió a pedir ayuda a cualquiera en twitter, pero de igual manera le hicieron ver que probablemente esa gente que acude a su casa a pedir dinero esté en la misma situación que él cree justificable.
Por eso pienso que León no está equivocado ni tiene mala intención, solo que no conoce de cerca las carencias que pueden llevar a alguien a pedir dinero gratis. Cuando se conoce la situación precaria en la que viven tantas personas, y el abuso al que se exponen, entonces se entiende la necesidad de apoyarlos y defenderlos para que puedan salir adelante. Si solo conocemos nuestro circulo cercano, es normal que creamos que nuestra situación es similar a la de los demás.
Los problemas del país y del mundo son demasiado complicados como para resolverlos en Twitter o con doctrinas de derecha o izquierda. La empatía, la solidaridad, la generosidad tendrían que nacernos a todos. Como no sucede así, algunos piensan que debería de ser obligatorio. Pero no se puede exigir libertad obligando a las personas a hacer lo que no desean. Por eso las respuestas no están en en ninguna ideología, sino en cada uno de nosotros. Pensar por uno mismo es mucho más valioso que seguir recetas para vivir bien. Entender que ni Marx ni Smith tienen las respuestas correctas. Que la realidad de cada persona es muy diferente de una ciudad a otra, de un estado a otro, de un país a otro. Que somos mucho más complejos de lo que algunas personas nos quieren hacer creer.
Al final, solo espero que León haya aprendido de este incidente. Si no fue así, entonces ése es el peor escenario de todo esto.