Hoy fui a comer al Casino de Monterrey, y
de repente mi mamá saludo a alguien que iba pasando a otra mesa y esa persona
la saludó. Mi mamá me dijo 'mira es tu maestra', entonces volteé a ver quién
era y vi a mi maestra de maternal, miss Nelly. La última vez que la vi tenía 4
años. Ella tampoco me reconoció de inmediato (obviamente). Mi maestra había
visto a mis papás hace algunos meses ahí mismo en el Casino de Monterrey. Aquel
día yo me fui antes que mis papás y después me dijeron que la había regado en
irme temprano porque habían visto a miss Nelly; ella los había reconocido y les
dijo que me mandaba saludos. En ese entonces me dio coraje no haberme quedado.
Volviendo a hoy, mis Nelly estaba
saludando a mi mamá sin darse cuenta que yo estaba ahí. Cuando me dijo mi mamá
que era mi maestra y la vi, tardé en reconocerla pero dos segundos después de
que nos vimos, los dos nos emocionamos de vernos. Yo le llevaba flores al
colegio, cuando me dio clases. Estaba enamorado de ella a los 3 años, que fue
cuando la conocí. Encontrarme con ella ahorita fue muy bonito. Me dio un abrazo
fuertísimo que duró varios segundos, me llamó 'mi vida' 'mi amor' y 'precioso'.
Me dijo que le daba mucho gusto verme y había sido su mejor alumno.
Independientemente de que sea verdad o
simples cumplidos para quedar bien, haberla visto después de tanto tiempo me
dejó muy contento. Le dije 'hola mis Nelly' y se puso muy contenta de que la
llamara así. La verdad es que para mí no hay otra manera de llamarla, siempre
va a ser 'miss Nelly' aunque yo tenga 60 años.
Me volvió a abrazar dos veces más y luego
se despidió para irse a sentar a su mesa.
Y así fue como hoy, después de 25 años de
haber conocido a mi maestra, mi primer amor, la volví a ver y me llenó de alegría.