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Los libros como objetos me encantan, ya he escrito de esto antes. Pero ahora que tengo el Kindle, y que resistí la
tentación de venderlo (porque en realidad no lo quería y es un regalo caro que
podía cambiar por otra cosa) tengo que decir que le he agarrado un placer
culposo. Acepto que
disfruto mucho de las ventajas del Kindle. Puedo leer en la noche sin necesidad
de encender la luz, y cuando me da sueño solo apago el Kindle y cierro los
ojos, no hay necesidad de levantarme. También puedo acomodarme mejor para leer
ya que no tengo que detener el libro para que no se cierre. Otra ventaja (y creo que es la más importante) es la
facilidad para conseguir libros. En el momento que quiero comprar uno, entro a
la tienda, lo descargo y lo comienzo a leer. Esto no era un problema antes de
conocer el Kindle, porque como siempre compraba más libros de los que alcanzaba
a leer antes de volver a la librería, siempre tenía algo pendiente. Pero ahora
que puedo comprarlo en el instante que se me antoja, es una maravilla, porque
me ha pasado que no tengo ganas de leer ninguno de los libros que tengo
pendientes; o a veces me da por leer sobre algún tema y no tengo que hacer una visita a la librería (o esperar a que me lleguen por correo). Y cuando salgo de
viaje, no hay preocupación por llevar algún libro extra por si termino el que estoy leyendo, o decidir antes de irse qué libros llevar. También, las cualidades que
te ofrece son buenas. Puedes subrayar el libro y hacer un post en Facebook;
incluso aparecen en el libro lo que otra gente ha subrayado. Y también tienes
la opción de buscar palabras en el diccionario en el mismo aparato.
Aun así, creo que nunca voy a dejar de comprar
libros físicos. Si llego a leer algún libro electrónico que me llame mucho la atención
o que me identifique con él, lo voy a comprar físico para tenerlo en mi estante aunque
gaste el doble y lo tenga dos veces. Por ejemplo, si hubiera leído en libro
electrónico ‘The Catcher in the Rye’, o ‘El Principito’ o cualquier otro que me
haya marcado, estoy seguro que como quiera lo tendría en mi estante. Incluso
cuando me he comprado libros con pasta blanda, y me llegan a gustar mucho, los
vuelvo a comprar en alguna versión más bonita, o en alguna versión más antigua
que me llame la atención. Por lo tanto, no creo que alguna vez deje de comprar
libros. De hecho hay una estadística del 2009 que dice que solo 15% de la gente
que tiene un libro electrónico dejó de comprar libros tradicionales.
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Otra
desventaja son las portadas que aparecen en el Kindle, de ofertas y libros que
están promocionando, me desesperan muchísimo. No soporto traer mi aparato y que
en vez de ver la portada del libro que estoy leyendo, aparezca una de un hombre
y una mujer besándose, o una imagen de 5 libros con el precio de lo que
cuestan. Es muy incómodo no tener la opción de cambiar esas imágenes que
aparecen como si fuera el libro que estás leyendo. Ya van varias veces que
gente se queda viendo el Kindle y les tengo que explicar que no es la portada de lo que estoy leyendo.
Y por último, el Kindle es frágil, y tienes que
cuidarlo más. Yo nunca pensaba dos veces para dejar un libro en mi coche cuando
iba a algún lugar, pero con el Kindle, tengo que estar pendiente de que no se
me vaya a olvidar. No le puedes despegar el ojo en ningún lugar porque corres
el riesgo de que te lo roben, lo que no sucede con un libro tradicional. Y si
un libro se te olvida en el avión o en el metro, lo vuelves a comprar y no
gastas más que una pequeña fracción de lo que te cuesta el libro electrónico.
Por lo tanto, las ventajas y desventajas que
ofrecen los libros electrónicos hacen que estos sean más una opción agradable
que un reemplazo de los libros tradicionales. Querer compararlos es difícil,
pero qué bueno que no tenemos que escoger entre unos u otros; especialmente
cuando son un regalo.
4 comentarios:
Sin duda, la posibilidad de comprar kindle en México ha venido a revolucionar la forma en que se lee en nuestro país para bien.
Hola! Por supuesto, y sigo pensando que la mayor ventaja es poder conseguir libros inmediatamente conectándote al internet. Aunque me cuesta más terminar libros en kindle que en fisico, no se por qué.
Yo no tengo Kindle y no me llama mucho la atencion tampoco tener uno, asi que a menos que sea un regalo (que dudo que alguien lo regale) sigo prefiriendo mi tarjeta de regalo gandhi =) pero me gusto tu post!! y como todo la tecnologia es util en muchas situaciones, y en otras no tanto, en fin, a mi tambien me encanta tener los libros en fisico y me encanta verlos acomodados, saludos!
Hola Mile!! pues la verdad te recomiendo probarlo, he escuchado de gente que le agarra mucho el gusto y sí llega a cambiar su manera de leer. pero claro, asi como tu, yo creo que nada reemplaza la experiencia de leer un libro tradicional: la textura, el olor! Ojalá alguien te regale un kindle para que hagas la prueba.
Lo que me ha pasado ultimamente, y que es una lastima para el kindle, es que uso mucho más el ipad para leer libros electrónicos que el kindle. como que tiene más ventajas y lo usas para más cosas.
saludos!!!!
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