En enero pasado me propuse 4 simples propósitos de año nuevo, por la pura curiosidad de saber si podría cumplirlos por dejarlos anotados en un lugar que no se perdieran fácilmente. De veras que sí trate de cumplir mis propósitos; no me gusta decir que voy a hacer algo y ni siquiera intentar realizarlo. Por eso, cuando decidí escribir propósitos de año nuevo, solo escogí 4, y puse atención en lo que escribía, para no quedar en ridículo.
El primero de ellos era leer al menos 20 libros, y para ello me iba a ayudar de una lista que se publicó en Novelistik. Ese propósito no lo voy a cumplir. Apenas llevo 5 y no he podido terminar dos de los que empecé. Quiero terminar por lo menos Mein Kampf, solo por tachar uno más en la lista de Novelistik, el de "leer un libro prohibido". También cumplí en esa lista un propósito agregado por mi amigo Sergio de Regules, que era leer un libro suyo; ese sí lo cumplí. Y la verdad es que no sé por qué he batallado tanto para terminar libros que empiezo y para darme el tiempo para leer. Creo que voy a tener que seguir trabajando en eso para el próximo año. Pero, claro, cuando llegó el momento de escoger regalos para el amigo secreto de la oficina, pedí más libros, para ponerlos en lista de espera.
El segundo propósito era escribir 2 entradas por mes en mi blog. Este también está difícil que lo complete, y si lo llego a completar tal vez sea por mi obsesión pueril de decir que sí cumplí mi propósito. Después de escribir está entrada, todavía me van a faltar 5 antes de terminar el año para cumplir la meta. Pero en este caso, también me dan ganas de demostrar cómo sí tuve mucho interés en cumplir el propósito. Descargué la aplicación Ever Notes (y tengo que aceptar que me ha servido muchísimo) para llevar apuntes de posibles temas para desarrollar en mi blog, y tengo más de 20 notas para desarrollar, algunas muy avanzadas, y que no logro concretar para publicarlas aquí. Eso sí me da coraje y me frustra un poco. Ciertamente no me he dado el tiempo yo para escribir, pero también tiene que ver con las actividades que quiero y necesito realizar durante la semana que no me dejan espacio para poner mi mente en blanco y poder concentrarme. Entre el trabajo, el ejercicio, mi novia, mi familia y mis amigos, poco tiempo me queda para estar totalmente despejado y armar ideas coherentes. Aunque parezca presuntuoso, me gusta escribir una entrada bien escrita, no solo publicar apuntes que me llegan en un momento de inspiración cualquiera.
El penúltimo propósito también tenía que ver con este blog, y este sí lo cumplí desde el inicio del año. Cambiar la imagen del blog. Justamente en enero me di el tiempo para escoger un nuevo formato para mostrar la pagina de mi blog; ahora se muestran todas las entradas en la página de inicio en fotos, no como antes que aparecía toda la entrada y solo cabían como 4 antes de tener que presionar "siguiente". Y me llevé una grata sorpresa. En verdad no sé si fue el cambio de imagen la razón, pero desde ese momento recibí muchísimas más visitas que antes. Antes de enero de este año recibía máximo 1700 visitas al mes. Lo normal era entre 600 y mil visitas. Pero el mismo mes que cambié los formatos, y desde el día que los cambié, las visitas se multiplicaron. En enero recibí un nuevo record de visitas: 3600. Y no ha bajado de 2600 por mes desde entonces.
Por último, mi propósito de trabajar más eficientemente y dar mejores resultados en el trabajo. Esto más que otra cosa era una manera de tratar de poner más atención en lo que hago para ganarme la vida, y no solo cumplir una cantidad de horas a la semana para recibir un cheque. Quería sentir que estaba realizando más de lo que me pedía mi trabajo. Incluso pensar si estaba estancado en mi zona de confort. Por lo que requería preguntarme si estaba contento con mi trabajo, si necesitaba algún reto, si me sobraba tiempo para hacer proyectos independientes. Por lo que respecta a este propósito puedo decir que lo cumplí, aunque no en la manera que esperaba. Pensé mucho en lo que quería para mi futuro cercano. Me ayudó a esforzarme por hacer tiempo para ocuparme más, en vez de solo ir a trabajar por cumplir. Pero en agosto de este año, como escribí aquí, cambié de trabajo. Me contrataron en una empresa nueva y ahora tengo mucho más trabajo del que tenía antes, muchos más retos que superar (por no decir problemas a resolver) y gano más que antes.
Después de todo, me sirvió mucho tener propósitos claros este año. Me ayudó a evaluar un año, como nunca lo había hecho. Espero terminar muy bien estas ultimas semanas, y enfocarme más el próximo año para no quitarle tiempo ni importancia a mis otras actividades, pero cumplir con los dos propósitos que se quedan pendientes en 2015.