Caminando juntos (Walking together)

Ya desde hace mucho tiempo me di cuenta que no valía la pena preocuparse por tener novia, por enamorarme, por estar con alguien o por no quedarme solo. Hasta llegué a pensar en la posibilidad de nunca encontrar con quien estar a gusto y pleno. Me siento muy bien sin esos prejuicios de  la vida en pareja o solitaria. Empecé a hacerle más caso a los dichos de "más vale solo que mal acompañado" o lo que dijo Robin Williams "Solía pensar que la peor cosa en la vida era terminar solo. No lo es. Lo peor de la vida es terminar con alguien que te hace sentir solo". Me convencí de que para llegar a encontrar a alguien con quien valiera la pena estar, primero tenía que entender que es necesario poder ser feliz solo. Si no eres feliz contigo mismo, tal vez puedas encontrar la felicidad con alguien más, pero tu felicidad siempre dependerá de otra persona. Yo no creo que mi felicidad deba de estar fuera de mi control. Si puedes ser feliz contigo mismo, cuando encuentras a alguien con quien quieres estar, resulta más sencillo ser feliz y hacer a alguien feliz; porque no estás con alguien por necesidad, sino porque en realidad quieres estar con ese alguien. Y yo por fin encontré a alguien con quien quiero estar y con quien quiero compartir mi vida.

Encontré alguien a quien amo y me ama. Con quien pude establecer una relación con nuestras propias reglas y sin clichés. Nadie nos presionó para hacer nada que no quisiéramos, y las tradiciones sociales poco nos importaron para comportarnos de una manera que no fuera como realmente queriamos. Cuando me pregunten si vine por mi libre y espontanea voluntad, voy a decir que sí confiado en que es totalmente cierto. Nunca me había sentido con tanta libertad en una relación de pareja. El complemento que no limita ni afecta la otra parte, simplemente comparte y disfruta de la compañía, de la visión imperfecta y que así la desea, imperfecta.

Las ganas de compartir experiencias, tiempo, espacio. Saber que para lograr que una vida funcione y se disfrute se necesita aportar con generosidad nuestro ser. Al final es todo lo que tenemos, nosotros mismos; lo demás son ficciones de nuestra imaginación. Por eso nos damos y nos entregamos, para sentirnos vivos. Porque solo importamos nosotros. Nosotros. Qué bonita palabra. Ya no soy yo, ya no es ella. Y sin embargo, lo que nos hace especiales es que vamos cada quien en su camino, pero agarrados de la mano. Caminando juntos.

Por eso hoy es un día diferente. Porque doy un paso más en mi vida, pero no lo doy solo, tal vez por primera vez. Y quiero seguir caminando acompañado, pero no por estar acompañado, sino porque quiero estar con ella. No me interesa estar casado. Quiero casarme con ella. Y por eso hoy voy a pedirle a mi novia que se case conmigo.





It's been a while since I realized that it was not worth worrying about finding a girlfriend, falling in love, being with someone or not ending alone. I even thought about the possibility of never finding someone with whom to feel at ease and fullfilled. I feel very well without those prejudices about the married life or the lonely life. I began to pay more attention to the words of "better alone than in bad company" or what Robin Williams said "I used to think that the worst thing in life was to end up all alone. It's not. The worst thing in life is ending up with people who make you feel all alone". I am convinced that in order to find someone worth being with, I first had to understand that it is necessary to be able to be happy by myself. If you can't be happy on your own,  you might be able to find happiness with someone else, but your happiness will always depend on another person. I do not think my happiness should be out of my control. If you can be happy all by yourself, then when you find someone you want be with, it is easier to be happy and make someone happy, because you are not with that person out of necessity, but because you really want to be with that someone. I finally found someone I want to be with and with whom I want to share my life.

I found someone whom I love and who loves me. With whom I was able to establish a relationship with our own rules and without clichés. Nobody pressured us to do anything we didn't want to do, and we did not follow social traditions when we didn't think they fitted us. When the judge asks me if I came spontaneously and by my own free will, I will say yes with confidence because that is absolutely true. I had never felt so free in a relationship. The complement did not limit or affect the other part, but it simply shared and enjoy the company of imperfect companion; and thats exactly how it was wanted, imperfect.

The desire to share experiences, time, space. Knowing that to achieve a life worth living, work and enjoyment is needed in order to give  ourselves generously to each other. As it is all we have, ourselves; everything else are figments of our imagination. That's why we fully give ourselves, to feel alive. Because only we matter. We. What a beautiful word. It is no longer I, it is no longer her. And yet, what makes us special is that we can each walk our way holding hands. Walking together.


So today is a different day. Because I'm giving a big step in my life. But I won't give it alone, maybe for the first time. And I want to keep walking accompanied. But not for the sake of being accompanied, but because I want to be with her. I do not want to be married. I want to marry her. And so today I'm going to ask my girlfriend to marry me.

2 comentarios:

milena dijo...

felicidadees!!!!

José María Hdz dijo...

gracias, mile!!