Hoy me toca escribir de algo que en realidad no quisiera. Puede ser que gracias a la vida no tengo mucho de qué quejarme y por eso esta anécdota me parece muy grave. Pero el día de hoy, sábado, me negaron el acceso a un antro sin razón.
Yo vivo en Monterrey; más específicamente en San Pedro Garza García. Es un municipio donde vive mucha gente que tiene muchísimo dinero. Gente rica. Por lo tanto a veces la gente puede ser muy especial y creerse mucho. Para salir en la noche en un fin de semana las niñas casi se visten como artistas de cine, y en los antros el acceso es admitido según tu parecer.
Mis amigos y yo nos juntamos en mi casa para empezar la fiesta ahí y después irnos a un antro que se llama ROE. Yo nunca había ido, y solo había escuchado que estaba caro (más caro que los otros antros) y que iba pura gente 'nice'. La verdad yo no acostumbro ir a lugares muy caros, y de preferencia que no sean muy elitistas. Pero Ev, la novia de mi amigo Ka, había hecho la reservación, y aparte nunca había ido a ese lugar, entonces bueno, no había por qué decir que no. Nos quedamos en mi casa precopeando hasta la media noche. Luego nos fuimos al antro.
Llegamos y había mucha gente afuera esperando que abrieran. Ya para empezar teníamos que esperar. A mi no me gusta estar afuera esperando, pero como en el 90% de los antros así es pues uno tiene que ceder. Luego abrieron la puerta y empezó a pasar la gente. Obviamente, como en todos los antros de San Pedro, primero pasa la gente VIP y luego los demás, entonces ahí estuvimos tratando de llamar la atención del guardia para que nos permitiera entrar.
Llegamos y había mucha gente afuera esperando que abrieran. Ya para empezar teníamos que esperar. A mi no me gusta estar afuera esperando, pero como en el 90% de los antros así es pues uno tiene que ceder. Luego abrieron la puerta y empezó a pasar la gente. Obviamente, como en todos los antros de San Pedro, primero pasa la gente VIP y luego los demás, entonces ahí estuvimos tratando de llamar la atención del guardia para que nos permitiera entrar.
El punto es que cuando nos dejaron pasar, primero pasaron mis dos amigos, Ka y Ru, con sus novias Ev y Al, luego pasó Da, luego todas mis amigas, Maj, Ste, Mar y Pa, y al final quedamos mi amigo Ad y yo. Ad venia detrás de mi y a partir de mí nos negaron el acceso. Ad y yo nos quedamos fuera. Me dio coraje, pero bueno, tampoco era la primera vez que me hacían esperar en un antro. Pero pasaba el tiempo, pasaban las personas alrededor de mi y Ad y yo nos quedamos fuera. Luego Ad se fue a intentar entrar por otro lugar a algunos metros de donde estaba yo. Yo le seguía pidiendo al guardia que nos dejara pasar a mi amigo y a mi. Pero luego me di cuenta que a Ad le preguntaron '¿Vienes solo?' y el contestó 'Sí'. Yo me sorprendí, pero también entiendo que entrar por separado era más fácil. El problema es que a mí me negaron el acceso por 45 minutos. Ev, que tenía la reservación llamó para decir mi nombre y que me dejaran pasar. El guardia preguntó '¿Quién es Chema Hernández?' Y respondí que yo, y aun así me pidió que siguiera esperando. Yo estaba indignado. Después de más de 7 intentos de entrar, aludiendo que mis amigos estaban adentro, que ya habían pedido una botella, y que solo faltaba yo en la mesa, deduje que no me iban a dejar pasar. Estaba ahí afuera, solo, alrededor de personas que si eran de los conocidos pasaban de inmediato, a otros los hacían esperar 15 minutos antes de dejarlos pasar, pero habíamos varios que simplemente ignoraban y nos pedían que esperáramos. Se podrán imaginar lo humillante que es estar afuera esperando viendo pasar a todos.
Mis amigos seguían llamándome y enviándome mensajes de texto preguntando por qué no me dejaban entrar y dándome consejos para poder entrar, pero no había mucho que hacer. Yo para ese tiempo ya no quería entrar. Me moría de la rabia por que no me dejaran pasar. Por qué tenía que aguantar yo esa vileza. La respuesta era simplemente porque mis amigos estaban adentro y yo quería estar con mis amigos. No había otra razón. No hubiera sido la primera vez que me retirara de un lugar por que no me pareciera el trato. Si no me gustan las reglas de un lugar, mejor me voy. Pero en esta ocasión no podía irme, o más bien sí podía pero no quería irme sin mis amigos.
Cuando mis amigos me avisaron que ya iban a bajar para hablar con alguien que me dejara pasar el guardia me llamó y me dijo que quería hablar conmigo. Me explicó que le daba mucha pena dejarme esperando, que a él no le gustaba hacer eso, pero que había alguien que me había denegado el acceso y que él tenía que cumplir las ordenes sin preguntar. Me dijo que el club se movía en un círculo muy cerrado y que por eso no dejaban pasar ciertas personas. Yo en verdad no lo creía. ¿Por qué no me dejaban entrar? ¿Quién había dado esa orden? Yo sé que cuando no te dejan entrar a un lugar como esos es por tu apariencia física. Pero, sin tratar de verme por encima de otras personas, yo estuve observando cómo iban vestidas las personas que entraban, y sinceramente yo estaba vestido igual o más formal que muchos. No era mi vestimenta, y bueno, mi apariencia física, tengo que dar gracias porque no soy alguien que si bien nos soy un galán, tampoco me quejo de ser feo, pero el punto es que con palabras bonitas me dijeron que no iba a pasar, 'ahí disculpe'. Y yo, con el orgullo dañado, me fui de ahí. Quería llorar del coraje.
Me llamó Ka al celular y me reclamó que no hubiera dado suficiente batalla a los guardias, que no me hubiera enfrentado a ellos diciendo que tenía dinero y que no iba mal vestido. Quería que reclamara gritando que me dejaran pasar porque no tenían por qué hacerlo. Yo solo le dije que para mí no era tan importante entrar a ese antro. Y es verdad, si no me quieren ahí, si tengo que ponerme a gritar y dar un espectáculo para que me dejen pasar a un lugar que me importa poco entrar, entonces en verdad no quiero entrar. Yo no tengo que demostrarle nada a nadie. Sobre todo si hay otros lugares que me gustan y que no me ponen ningún 'pero' para entrar. Pero ahora lo que me agobiaba era otra cosa: qué iban a hacer mis amigos. En verdad me daba mucha pena ponerlos en esa situación (aunque en realidad yo no los puse en esa situación, al menos no directamente). ¿Iban a apoyarme saliéndose del antro? ¿Importaba lo suficiente que solo a mí no me hubieran dejado entrar para que ellos decidieran renunciar a su acceso también? Dentro de mí yo quería que me apoyaran, sobretodo porque ¿cuál era la razón de estar en ese antro? ¿divertirse, sentirse en una posición social más alta, o estar juntos? En realidad lo que menos necesitábamos todos nosotros era ese antro, aunque la idea era ir ahí.
Por un momento pensé que me iban a 'dejar morir'. Y en realidad uno sí lo hizo. Pero prácticamente todos mis amigos se salieron del antro. Habían pedido ya una botella, entonces se la terminaron la pagaron y se salieron. Las niñas salieron mostrándome su indignación, mientras yo les pedía disculpas y ellas me respondían que no había nada que disculpar. Nos fuimos a otro antro, pero ya era tarde, eran las 2 de la mañana, y justamente este sábado cambió el horario de verano, por lo tanto eran las 3 ya. Tuvimos muchos problemas para entrar todos, porque a algunos si los dejaban pasar y a otros no, pero al final se estaban poniendo muy pesados y decidimos irnos.
Yo me siento todavia muy mal por todo lo que pasó. La verdad es que se arruinó la noche, y algo de culpa tengo yo. Debí de haber pasado antes que las niñas, ya que es más difícil que le nieguen el acceso a ellas, pero bueno en realidad yo no sabía que iban a ser así de mamones. De hecho una vez en otro antro de San Pedro, le negaron el acceso descaradamente a una sola persona que iba en el grupo que iba a entrar. De plano le dijeron 'todos pueden pasar pero tú no entras'. No puedo saber si eso mismo hubiera pasado ayer, pero independientemente de lo que pudiera haber hecho para entrar, a mí me viene y me va si me dejan entrar a un lugar, siempre hay otra opción para divertirse y en especial este antro que todos me han dicho que no tiene nada de especial, lo unico que tiene es exclusividad, y al parecer es suficiente para que mucha gente quiera entrar y aguantar esas vejaciones. Sinceramente no lo entiendo. Era ridículo estar ahí afuera esperando, incluso los que entraban; había unos que llegaban diciendo que tenian una reservación a nombre de fulanito de tal y les decían que esa reservación no existía, luego llegaba alguien más preguntando por la misma reservación y los dejaban pasar de inmediato, y cuando los primeros reclamaban que ellos sabían que los que habían pasado había sido con esa reservación les decían que no era cierto, que esos otros habían dicho otro nombre. Entiendo que eso es normal en este ambiente, pero no puedo dejar de sorprenderme, no es lógico; la gente va a gastar dinero, siendo más caro que cualquier otro lugar, se visten bien, hacen una reservación que les niegan, los hacen esperar sin razón y todavía se dignan entrar.
Está claro que yo jamás voy a ir a ese antro. Y lo que mis amigos hicieron me llena de orgullo, pero no voy a dejar que vuelva a pasar, si alguna vez me vuelven a negar el acceso me voy a ir solo. Y para compensar por el dinero que mal gastaron por mi culpa, les voy a invitar una peda en mi casa, donde todos pueden entrar.
Yo me siento todavia muy mal por todo lo que pasó. La verdad es que se arruinó la noche, y algo de culpa tengo yo. Debí de haber pasado antes que las niñas, ya que es más difícil que le nieguen el acceso a ellas, pero bueno en realidad yo no sabía que iban a ser así de mamones. De hecho una vez en otro antro de San Pedro, le negaron el acceso descaradamente a una sola persona que iba en el grupo que iba a entrar. De plano le dijeron 'todos pueden pasar pero tú no entras'. No puedo saber si eso mismo hubiera pasado ayer, pero independientemente de lo que pudiera haber hecho para entrar, a mí me viene y me va si me dejan entrar a un lugar, siempre hay otra opción para divertirse y en especial este antro que todos me han dicho que no tiene nada de especial, lo unico que tiene es exclusividad, y al parecer es suficiente para que mucha gente quiera entrar y aguantar esas vejaciones. Sinceramente no lo entiendo. Era ridículo estar ahí afuera esperando, incluso los que entraban; había unos que llegaban diciendo que tenian una reservación a nombre de fulanito de tal y les decían que esa reservación no existía, luego llegaba alguien más preguntando por la misma reservación y los dejaban pasar de inmediato, y cuando los primeros reclamaban que ellos sabían que los que habían pasado había sido con esa reservación les decían que no era cierto, que esos otros habían dicho otro nombre. Entiendo que eso es normal en este ambiente, pero no puedo dejar de sorprenderme, no es lógico; la gente va a gastar dinero, siendo más caro que cualquier otro lugar, se visten bien, hacen una reservación que les niegan, los hacen esperar sin razón y todavía se dignan entrar.
Está claro que yo jamás voy a ir a ese antro. Y lo que mis amigos hicieron me llena de orgullo, pero no voy a dejar que vuelva a pasar, si alguna vez me vuelven a negar el acceso me voy a ir solo. Y para compensar por el dinero que mal gastaron por mi culpa, les voy a invitar una peda en mi casa, donde todos pueden entrar.
2 comentarios:
No puedo creer que leí. ¿Qué no es ilegal en Mty hacer esto? En el DF sí, lo cual al menos te da armas para combatirlo, aunque sigue pasando... en fin, qué horror. Mi solidaridad, amigo!
Hola Martín, gracias por leer y gracias por lo de amigo. Pues no creo que sea ilegal aqui en mty pero aunque fuera, ya sabes como somos aqui en México, lindo y querido, esas leyes no ayudarían mucho. Ni hablar, lo bueno es que no necesitamos eso para vivir jaja. Saludos.
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